Uno de los primeros conciertos a los que fui era de ópera. Era muy pequeño, me impactó mucho y me acuerdo que me entró un ataque de risa porque uno de los cantantes llevaba peluca y cantaba de una manera muy rara. No recuerdo bien la obra, solo recuerdo que me entró un ataque de risa y toda mi familia tuvo que salir del teatro porque les contagié la risa; cuando un niño chico se ríe, al final todos nos reímos aunque no sepamos porqué.
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